Se suele decir que quien se sienta al lado del presidente del Gobierno, es el que marca el perfil político del ejecutivo. Maria Jesús Montero, hasta ahora ministra de hacienda, ha sido elegida hoy vicepresidenta primera del gobierno y eso seguro que se verá reflejado en un mayor peso especifico de esta cartera. Nadia Calviño, quien ocupaba ese sillón hasta ahora y la ‘responsable’ de que se realice este baile de sillas, marcó durante su mandato un perfil económico claro en los cuatro años anteriores, siempre con la mirada puesta en Europa, donde terminará presidiendo el BEI.
Ahora, la designación de Montero como vicepresidenta primera marca un claro foco en la recaudación tributaria. El gobierno ya anunció hace unos meses, que, a pesar de las subidas recientes, la presión fiscal seguirá aumentando en 2024. En su plan presupuestario para el próximo año que el gobierno envió a la Comisión Europea el pasado mes de octubre, se recogía un aumento de la presión fiscal de alrededor de 7.300 millones de euros, así como un incremento de ingresos de unos 4.000 millones para la Seguridad Social. Y todo esto sin haberse constituido el nuevo órgano de gobierno.
Hace una semana conocíamos como la Unión Europea exigirá a España el próximo año recortar 13.500 millones de deuda y 7.000 de déficit. Se han establecido ajustes más duros para aquellos países que tengan una deuda pública por encima del 90% del PIB, y por tanto, deberán reducirla al menos un punto anualmente. Con este punto de partida afrontará España la reactivación de las reglas fiscales europeas, que llevan suspendidas desde hace casi 4 años que dio barra libre a los socios miembros para recuperarse de la pandemia y la guerra en Ucrania. Hace sietes días, estos parámetros se han reformado.
En definitiva, la vicepresidencia primera asignada al ministerio de hacienda deja en evidencia que la reducción de la deuda pública y la recaudación tributaria serán los principales protagonistas de la próxima legislatura dejando otros aspectos de la economía pasar a un segundo plano.
Santiago Gonzalez, socio de fiscal de PKF Attest
Fuente: Expansión